Margarita
Guerrero de Barrera Oro, que falleció el 17 de agosto a sus 93 años. Fue una de
las fundadoras de Madres de Plaza de
Mayo, referente de la defensa por los
Derechos Humanos, y luchó más de 40 años por encontrar a su hijo Jaime
Barrera Oro, secuestrado en Buenos Aires durante la dictadura
cívico-militar argentina de 1976-1983.
El médico Jaime Barrera Oro, hijo de Margarita, fue
secuestrado por los militares el 12 de octubre de 1976 a la salida de un café en el barrio porteño de Palermo.
Desde entonces, Margarita emprendió una incansable lucha para hallar a su hijo.
En el camino, se hizo cargo de su nieto Sacha, quien quedó huérfano
desde chiquito.
Sacha Barrera Oro, nacido en
Chile y reconocido actor y dramaturgo, fue criado por sus abuelos
paternos: Joe, que hizo las veces de padre, y Margarita, una ama de casa que
desarrolló tantos roles como pudo, inclusive el de ser una de las activistas de
los DDHH.
En 2016, al
cumplirse los 40 años del golpe de Estado, las Madres Margarita
Guerrero de Barrera Oro, María Assof de Domínguez y Agustina
Elcira Corvalán de Vera fueron distinguidas por la Legislatura
mendocina a raíz de la lucha y el compromiso en la búsqueda de memoria, verdad
y justicia.
"La memoria hay que
mantenerla viva y lo importante es que la gente tiene memoria. No esperan que
les pase a ellos para recién reconocer lo que pasó durante la dictadura cívico
militar. Hay que mantener la memoria para que esto no vuelva a pasar, nunca más”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario