lunes, 26 de diciembre de 2011

Mafalda consulta por segunda vez el oráculo

Con la llegada de las Fiestas Navideñas, Mafalta se pasea por las calles de su pequeña ciudad, entre visita y visita a ciertas tiendas, y en la esquina más próxima, encuentra otra vez el “oráculo”. A la mente de Mafalda se le vienen todas aquellas dudas que aún tiene sobre la profesión de ser una Educadora Social. Las mismas instrucciones en la máquina “introducir una moneda de un euro”, pero el tiempo es menor, cuatro minutos sólo para contestar. No importa, dice Mafalda, con el frío que hace, cuanto menos tiempo me encuentre quieta, mejor.
- ¿Me han dicho que la Educación Social es una profesión dónde se prioriza el contacto con las personas?
- La Educación Social es una profesión de cercanía, no es posible educar a distancia. La relación con las personas, con los grupos y con las comunidades, establece una implicación del Educador y de la Educadora Social para que juntos puedan transformar la realidad social.
- En la profesión de Educación Social, ¿es muy importante la persona?
- Como en todas las profesiones, hay aspectos personales que pueden limitar y otros potenciar el desarrollo de la misma. Es verdad que los Educadores y Educadoras, son personas implicadas, que expresan su solidaridad con los diferentes sectores y que se integran perfectamente en el tejido social de su barrio o de su pueblo. No todo el mundo vale para ser Educador y Educadora Social, eso mismo podemos decir de la profesión de medicina, si no puedes ver la sangre, seguro que no te decides por esta rama profesional.
- Si tan importante es la persona, ¿qué aptitudes deberá tener un Educador y una Educadora Social?
- Podríamos hablar de un montón de ellas, pero podemos destacar: capacidad de análisis y objetividad, seguridad en si mismo, sentir empatía, crear confianza, saber escuchar, observar, paciencia, suprimir la distancia y aceptar la proximidad, discreción, creatividad, capacidad de adaptación, disponibilidad para el trabajo en equipo, …
- ¿Hay algo de soñador y soñadora en la profesión de Educación Social?
- Yo creo que es verdad. Dicen que todos los grandes inventos de este mundo, estuvieron en la cabeza de algunas personas que primero los soñó y luego los hizo realidad. Los Educadores y las Educadoras Sociales, son personas utópicas, que sustentan sus avances en sueños, consiguiendo cambios en las realidades a través de colocar pilares que apoyan dichos sueños.
Mafalda vuelve a tomar aire, se esta aclarando, insiste que será Educadora Social, pero aún tiene dudas.
Al “oráculo”, se le enciende la luz roja comunicando que se ha terminado el tiempo.


Samuel N.P.

6 comentarios:

Alba dijo...

Cualquier sueño es posible si hay alguien que cree en él! Así que seguro... seguro, SEGURO, que algún sueño se nos va a cumplir!

Samuel Núñez Pestaña dijo...

Yo también tengo claro que algún suelo se cumplirá.

Asier Felix dijo...

Me encanta. tanto Mafalda como su padre berciano.
Un abrazo y felices fiestas navideñas ¡¡¡

Samuel Núñez Pestaña dijo...

Gracias Asier, ya sabes que el Bierzo te espera, aunque pierda la Ponferradina por goleada.
Un saludo y también felices fiestas y buen año 2012.

Sara dijo...

Que bonita mafalda y que precioso su relato, yo soy una casi del todo educadora y me ha encantado leer esto y más aún siendo escrito por alguien del Bierzo, sinceramente no estoy nada puesta de lo que pasa en Ponfe con la educación social, y he vivido alli toda la vida y espero que a partir de ahora me entere un poquito más! ^^

Samuel Núñez Pestaña dijo...

Sara, por lo que dices debes de vivir fuera del Bierzo. En esta comarca estamos luchando para que la Educación Social tenga su espacio dentro de la intervención social, no es fácil, cuesta, pero en eso estamos. Un saludo y gracias por visitar el blog.