martes, 24 de abril de 2012

Es momento de innovar en los Servicios Sociales


La innovación de producto es una de las estrategias de empresa encaminada a ganar competitividad en el mercado mediante ahorros de costes de producción o distribución  bien mediante éxitos comerciales (aumento de ventas, fidelización de clientes/as, aumento de cuota de marcado, etc).

Meter Drucker lanzaba la idea de que las empresas competían ya no con productos sino con modelos empresariales. Dichos modelos nacían de la innovación y eran más competitivos cuanto más intensa fuera la misma. De esta idea surgen posiciones sobre la innovación basadas en el análisis de la cadena de valor sectorial. Es decir la innovación puede recaer sobre aquellas partes de la cadena que aporten más valor al sector y a las empresas del mismo. Por eso se hace necesario conocer el sector, su cadena de valor para entender qué tipo de innovación es más interesante en el mismo.

Decía Steve Jobs que “la innovación es lo que distingue a un líder de un seguidor, por lo que ante momentos de crisis, los Servicios Sociales deben liderar cambios que tiendan a mejorar la situación de las personas, los grupos y los diferentes colectivos más frágiles.

Innovar en Servicios Sociales está muy relacionado con una mejora continua en las diferentes actuaciones. La diferencia es que en la mejora continua se ven resultados a corto plazo, y los cambios son graduales, mientras que en la innovación se producen grandes cambios, nuevos modelos de intervención,  y se pueden ver resultados a mediano y largo plazo. Mientras que la mejora continua es orientada al proceso, la innovación va orientada al resultado final.

Los y las profesionales de los Servicios Sociales (Educadores/ras Sociales, Trabajadores/ras Sociales, Psicólogos/as, etc), no pueden esperar a que se les diga lo que tiene que hacer, y deben hacer propuestas de cambios, incluso ponerlas en marcha. La formación y experiencia tiene que posibilitar la innovación y la adaptación a las nuevas necesidades sociales.

Innovar en Servicios Sociales es optimizar recursos, visualizar las prestaciones, conocer las necesidades y demandas, disminuir costes, desarrollar nuevas estrategias de intervención, aplicar las nuevas tecnologías, hacer más atractivo el trabajo, mejorar la imagen, contar con las personas,  desarrollar la creatividad, aprovechar el trabajo en equipo, coordinarse con profesionales de otras instituciones, etc.

Innovar es arriesgarse, y como decía Séneca “no es porque las cosas son difíciles por lo que no nos atrevemos; es porque no nos atrevemos por lo que son difíciles”.

Samuel N.P.