Utilizar el color blanco el 25N tiene su origen en la campaña
del “lazo blanco” que nace en Canadá. El
6 de diciembre de 1989, en una Escuela Politécnica de Ingeniería en Montreal
fueron asesinadas 14 adolescentes por el hecho de cursar una carrera destinada
a hombres. El asesino al grito de ¡feministas!, entró en la facultad y las
mató. A partir de esa fecha un grupo de hombres canadienses pensó que tenían la
responsabilidad de implicarse, e implicar a otros hombres, en hacer algo para
que cosas así no sucediesen más, y había que dejar de permanecer en silencio.
La campaña se lanzó en 1991 en Toronto. Y en 1999 varias asociaciones de
hombres y mujeres se propusieron desarrollar la campaña del “lazo blanco” en
varios países de la Unión Europea.
La dinámica de los “círculos blancos” se ha desarrollado con
motivo del “Día Internacional para la eliminación de la violencia contra las
mujeres”, el 25 de noviembre de 2017, en plazas y locales públicos de las
poblaciones de de Arganza, Cacabelos, Camponaraya, Carracedelo y Toral de los
Vados, todos enmarcados en la comarca del Bierzo. La actividad fue una iniciativa
del grupo de profesionales del Equipo CEAS (Centro de Acción Social) de la
Diputación de León en la que han colaborado los Ayuntamientos de las
localidades señaladas anteriormente, colegios y asociaciones.
“Círculos blancos” es una dinámica participativa, dirigida a
toda la población, independientemente de su edad, desarrolla aspectos de
comunicación, relación, cooperación y compromiso.
Se les pide a las personas presentes en el acto que se ocupen el
lugar que más les gusta del espacio, procurando no estar juntos. Se les da una
tiza blanca para que marquen un círculo alrededor de ellos o de ellas. El círculo
blanco simboliza la violencia que nos envuelve, que está presente en
diferentes momentos de nuestra vida. Se pone una canción, relacionada con el
tema de la violencia machista, en este caso se decidió “la puerta violeta” de
la cantautora Rozalén. Mientras suena la música la gente deja su círculo y
busca otro vacío, unos segundos y se mueve hacia otro. Se dice que los
movimientos se hagan sin hablar y con el menor ruido posible, así se puede
escuchar la letra de la canción más detenidamente. Se finaliza la dinámica
cuando la canción termina.
Nuestro “circulo blanco” se manifiesta como el compromiso
personal en la lucha contra la violencia machista. El ocupar los otros “círculos”
y no dejar ninguno vacío, lo interpretamos como que ninguna víctima estará sola.
El salto de unos a otros “círculos”, será el apoyo de toda la comunidad para no
silenciar y no permitir la violencia contra las mujeres.
Samuel N.P.
No hay comentarios:
Publicar un comentario