domingo, 22 de febrero de 2009

La Asociación de Asperger ofrece a los colegios apoyos para los niños y niñas afectados

La Asociación de Asperger de León (Asperle) ha elaborado un programa de ayuda que está ofreciendo a los colegios a los que asista un niño o niña diagnosticado con el síndrome, incidencia que afecta a siete de cada mil pequeños. El servicio se ha ideado para dar apoyo en habilidades sociales en los recreos a los miembros de la asociación. Asperle, que lleva funcionando un año, cuenta con treinta de los cincuenta y cinco asociados de Castilla y León , «pero el número de afectados es mayor», asegura la presidenta de la asociación en Castilla y León, Marisa Fernández. «Los padres no creen que sus hijos tengan el síndrome, porque son niños y niñas muy inteligentes, que no saben relacionarse con los demás». Fernández da las claves de los síntomas de un síndrome incluido en el aspectro autista.
La asociación de León está avanzando en el diagnóstico precoz y tratamiento de este trastorno. Asperle ha elaborado un programa de apoyo en los recreos, «es un apoyo técnico» -”comenta la psicóloga Mercedes Jimeno, especialista en psicología infantil, lenguaje y desarrollo. «La asociación ha contratado a más personal y hemos elaborado un programa de apoyo técnico. Primero habrá una fase de observación para comprobar cómo se comportan los niños en el recreo y con esa información elaboraremos un plan más individualizado a cada niño y niña. Se les enseñará a organizar, planificar y ejecutar los recreos». En el desarrollo de este programa han intervenido también Mónica Lizarralde, psicóloga de la asociación y Luz Rebollo, psicopedagoga.
Asperle ha diseñado también un taller para adultos cuyo objetivo es el entrenamiento de las personas afectadas en la búsqueda de empleo y habilidades sociales en el ámbito laboral. «Estamos centrados en trabajar habilidades sociales, tanto individuales como grupales», afirma Jimeno. Para fomentar estas habilidades sociales, la asociación ha diseñado un proyecto en el que participan actualmente cuatro adultos con el síndrome de Asperger en edad laboral. Los técnicos y psicólogos enseñan a estas personas estrategias laborales, como entrevistas de trabajo , y hacen un seguimiento de en las empresas. «Los adultos a los que estamos tratando han recibido un diagnóstico tardío. Ahora se está tomando más conciencia de este trastorno, que está dejando de ser invisible, y diagnosticamos el síndrome en niños y niñas de dos años», afirma Jimeno.
El síndrome de Asperger está dentro de la categoría más amplia de los trastornos generalizados del desarrollo, también denominados del espectro autista. Es un trastorno severo del desarrollo de origen neurobiológico muy frecuente.
Síntomas
La persona con síndrome de Asperger tiene un aspecto normal, es inteligente, con habilidades especiales en áreas restringidas, pero con problemas para relacionarse con los demás y en ocasiones presentan comportamientos inadecuados. Puede pasar desapercibido entre otras sintomatologías: déficit de atención, hiperactividad, trastornos del lenguaje, ansiedad, depresión y sobredotación. Los padres perciben esta diferencia entre los 2 y los 7 años «y muchas veces no aceptan lo que les está pasando», afirma Marisa Fernández. «Hay pocos profesionales que lo diagnostiquen. Es una discapacidad social de la que hay mucho desconocimiento tanto de la familia como de los profesionales».
La Asociación de Asperger de Castilla y León ha estado muy involucrada en la organización del II Congreso Internacional que se clausuró ayer en Sevilla en el que se debatieron los últimos avances en la detección y tratamiento.
Noticia: Carmen Tapia, Diario de León, 22 de febrero de 2009

No hay comentarios: