lunes, 5 de octubre de 2009

La lucha contra las drogas se sube a la bici

Quizá no es muy raro ver a la gente ataviada deportivamente los domingos por la mañana. Es ese día de la semana en el que nadie tiene prisa y la tranquilidad mañanera invita a muchos a salir de sus casas para pasear, correr o practicar cualquier otra actividad física. No debería por tanto llamar la atención cruzarse a una familia que con sus bicicletas camina a primera hora de la mañana por la ciudad. La cosa cambia, eso sí, cuando ese pequeño grupo se convierte en una riada de ciclistas que pedalean por un objetivo común: la lucha contra las drogas.Hace doce años que la capital maragata se transformó por primera vez en salida y meta de esta multitudinaria Marcha Cicloturista Contra la Droga, habiendo recorrido desde entonces cientos de kilómetros por las diferentes comarcas que lindan con ella. La vega del Tuerto, maragatería o la Cepeda, como en esta edición, han acogido a lo largo de la trayectoria de esta iniciativa a las decenas de familias y al millar de personas que apoyan con sus pedaleos esta causa.Una prueba consolidada en la que la competición queda fuera para dar paso a una jornada de convivencia en la que las alternativas al ocio juvenil y la unión de padres e hijos se hace patente cuando se alcanza la línea de meta. Alrededor de 1.560 personas formaron parte de esa riada verde sobre dos ruedas, que llegó a la ciudad a la una y media de la tarde, convenciendo a la organización del éxito de la marcha y de la posibilidad de poder arriesgarse a dar un paso más. Como explicó el concejal de Deportes, Juan José Simón, la intención de cara a la próxima edición es solicitar a la Junta de Castilla y León que a esta marcha cicloturista se le acople una media maratón, de esta forma, los que deseen hacer el recorrido propuesto corriendo, también podrán participar. Sin embargo, habrá que esperar un año para ver si este objetivo puede alcanzarse.De momento toca hacer balance de la carrera de este año, que daba comienzo a las 10:20 horas, momento en el que los más de mil ciclistas congregados en la Plaza Mayor partían hacía Villamejil, destino que alcanzaron una hora y media más tarde, para disfrutar del tradicional avituallamiento ofrecido por la organización y que consigue reavivar las fuerzas de los participantes para emprender el tramo de vuelta. Junto al bollo preñado, una manzana y un hojaldre y una camiseta como recuerdo a esta cita, que tiñó de verde la comitiva de vuelta a la capital maragata.Verde por la esperanza de conseguir que cada año esta marcha siga creciendo como hasta ahora, habiendo alcanzado en esta ocasión el mayor número de participación desde que se puso en marcha. La cita finalizó con la entrega de premios del concurso de viñetas y el sorteo de cinco bicicletas.
Noticia: La Crónica, 5 de octubre de 2009

No hay comentarios: